viernes, 13 de febrero de 2009

František Kupka


František Kupka (Opočno, Bohemia oriental, 23 de septiembre de 1871 - Puteaux, Francia, 24 de junio de 1957) fue un pintor y artista gráfico checo considerado como uno de los pioneros y co-fundador de las primeras etapas del arte abstracto y cubismo órfico (orfismo). Las obras abstractas de Kupka surgieron de una base de realismo, pero más tarde evolucionaron hasta el arte abstracto puro.František Kupka nació en Opočno, Bohemia oriental (hoy República Checa). Desde 1889 hasta 1892, estudió en la Academia de Arte de Praga. En esta época pintó temas históricos y patrióticos. Posteriormente, entró en la Akademie der Bildenden Künste de Viena, Austria, donde se concentró en temas simbólicos y alegóricos. Expuso en el Kunstverein, Viena, en 1894. Su implicación con la teosofía y la filosofía oriental data de este periodo. Para la primavera del año 1896, Kupka se había establecido en París; allí acudió a la Académie Julian brevemente y luego estudió con Jean-Pierre Laurens en la Ecole des Beaux-Arts. Kupka trabajó como ilustrador de libros y carteles, durante estos primeros años en París, siendo conocido por sus dibujos satíricos para periódicos y revistas. En 1906, se estableció en Puteaux, un suburbio de París, y ese mismo año expuso por primera vez en el Salon d’Automne.

Sus primeras obras artísticas muestran una preocupación inusual, a menudo poco realista, por el color y por una distorsión expresiva.

Kupka quedó profundamente impresionado por el primer Manifiesto futurista, publicado en 1909 en Le Figaro. La pintura de Kupka del año 1909 «Teclado de piano / Lago» marcó una ruptura en su estilo representativo; su obra fue haciéndose progresivamente abstracta alrededor de 1910–1911, reflejando sus teorías de movimiento, color, y la relación entre la música y la pintura (orfismo).

Desde 1911 a 1912, al mismo tiempo que el pintor francés Robert Delaunay, Kupka realizó sus primeros trabajos completamente abstractos, como Amorfa: fuga de dos colores (1912, Galería Národní de Praga), que consiste en formas circulares coloreadas y líneas organizadas en una disposición rítmica. En 1911, acudió a reuniones del grupo Puteaux. Al año siguiente, expuso en el Salon des Indépendants en la Sala Cubista, aunque no quería ser identificado con ningún movimiento.

Creación en las Artes Plásticas, libro que Kupka acabó en 1913, fue publicado en Praga en 1923.

Continuó experimentando dentro de la abstracción, y agrupó su obra artística en cinco categorías: círculos, verticales, verticales y diagonales, triángulos y diagonales. En 1931, fue miembro fundador de Abstraction-Création. En 1936, su obra fue incluida en la exposición «Cubism and Abstract Art» (Cubismo y Arte Abstracto) en el MoMA de Nueva York, y en una importante muestra con otro excelente pintor checo, Alphonse Mucha, en el Jeu de Paume de París.

Una retrospectiva de su obra tuvo lugar en la Galerie Mánes de Praga en 1946. El mismo año, Kupka participó en el Salon des Réalités Nouvelles, donde siguió exponiendo con regularidad hasta su muerte. Durante los primeros años de la década de los cincuenta, obtuvo reconocimiento general y tuvo varias exposiciones individuales en Nueva York. No obstante, no fue un pintor tan influyente como otros del movimiento abstracto, por lo que no recibió el reconocimiento que se merecía hasta después de su muerte.

Entre 1919 y 1938 Kupka fue apoyado financieramente por su buen amigo, el coleccionista de arte y empresario industrial Jindřich Waldes quien acumuló una significativa colección de su arte. Kupka murió en Puteaux, Francia, el 24 de junio de 1957.

Kupka tenía un fuerte interés en teoría del color; alrededor de 1910 comenzó a desarrollar sus propias ruedas de color, adaptando un formato que previamente habían explorado Sir Isaac Newton y Hermann von Helmholtz. Esta obra a su vez llevó a Kupka a ejecutar una serie de cuadros que llamó «Discos de Newton» (1911-1912). Kupka estaba interesado en liberar los colores de asociaciones descriptivas. Su obra en esta área se cree que influyó a otros artistas como Robert Delaunay.


Iliá Repin

Iliá Yefímovich Repin, (ruso: Илья Ефимович Репин; Chuguev, Ucrania, 24 de julio./ 5 de agosto de 1844. - Kuokkala, Finlandia, 29 de septiembre de 1930) fue un destacado pintor y escultor ruso del movimiento artístico Peredvizhniki. Sus obras, enmarcadas en el realismo, contienen a menudo una gran profundidad psicológica y exhiben las tensiones del orden social existente. A finales de los años 20 comenzaron a publicarse en la URSS detallados trabajos sobre su obra y alrededor de diez años después fue puesto como ejemplo para ser imitado por los artistas del realismo socialista.Repin nació en la ciudad de Chuguev, en la gubernia de Járkov, en el centro de la región histórica de Sloboda Ucrania.

Su padre Yefim era un militar y colono que se dedicaba al cultivo de la tierra, pero estando permanentemente obligado al deber militar. Repin comienza a tener contacto con la pintura como aprendiz a la edad de trece años en el taller de un artista local dedicado a los iconos llamado Bunakov. Igualmente comienza a estudiar la técnica del retrato. En 1866 se trasladó a San Petersburgo e ingresó en la Academia Imperial de las Artes.

Con su primera obra maestra, "La resurrección de la hija de Jairo", ganó la medalla de oro de un concurso de la Academia, y con ello una beca para estudiar en Francia y en Italia. Así es como Repin vivió en París, donde recibió la influencia de la pintura impresionista, que tuvo importantes consecuencias sobre su forma de usar la luz y el color. Sin embargo, su estilo continuó siendo más afín al de los maestros de la vieja escuela, especialmente Rembrandt, y nunca llegó a convertirse en un impresionista. A lo largo de su carrera retrató a la gente común, tanto ucraniana como rusa, aunque en sus últimos años también representó en sus obras a miembros de la elite del Imperio Ruso, la intelligentsia, la aristocracia y al propio Emperador Nicolás II.

En 1878 Repin se unió a la Asociación de artistas Peredvizhniki, generalmente llamados Los Pintores Itinerantes, que en la época en la que Repin llegó a la capital rusa se rebelaron contra el formalismo de la Academia. La fama de Repin se extendió a raíz de su pintura "Los sirgadores del Volga", una obra que denuncia de un modo impactante el duro sino de estas personas. Desde 1882 vivió en San Petersburgo, realizando frecuentes visitas a su tierra natal ucraniana y ocasionalmente viajes al extranjero.

Poco antes del asesinato del Emperador Alejandro II en 1881, empezó a pintar una serie de cuadros relacionados con el movimiento revolucionario ruso: "Negativa a confesarse", "Arresto de un propagandista", "El encuentro de los revolucionarios" y "No lo esperaban", siendo ésta última su obra maestra sobre este tema. En ella se representa la sorpresa de los miembros de una familia ante la llegada al hogar de un exiliado político.

Su obra "Procesión de Pascua" en la provincia de Kursk es con frecuencia considerada un arquetipo del estilo nacional ruso, mostrando diversas clases sociales y las tensiones entre ellas, dentro del contexto de la práctica de una tradición religiosa y unidas en un avance lento pero continuo.

En 1885 Repin terminó una de sus pinturas de mayor intensidad psicológica: "Iván el Terrible y su hijo". Este óleo muestra a un horrorizado Iván que abraza a su hijo agonizante, a quien acaba de golpear y herir mortalmente en un acceso de furia. La mirada de espanto de Iván se halla en profundo contraste con la expresión de serenidad de su hijo.

Una de las pinturas más complejas de Repin, "Los cosacos Zaporogos" le escriben una carta al Sultán de Turquía, ocupó al artista durante muchos años, y es en gran medida fruto de una concienzuda investigación llevada a cabo conjuntamente con el historiador Dmytro Yavornitski, que incluyó numerosos viajes a la región de los cosacos zaporogos. Repin concibió esta obra como un estudio en clave de humor, pero también pensaba que recogía los ideales de la libertad, la igualdad y la fraternidad; en pocas palabras, el republicanismo de los cosacos ucranianos. Comenzó este cuadro en 1880 y no lo completó hasta 1891. Irónicamente fue adquirido de forma inmediata por el Emperador, quien pagó por él treinta y cinco mil rublos (una cantidad desorbitada en aquella época). Otra versión de este cuadro, realizada entre los años 1889 y 1896, se conserva en el Museo de Bellas Artes de Járkov. Además Repin pintó dos esbozos al óleo para este cuadro: uno de ellos, se encuentra en la Galería Tretiakov y el otro está en el museo nacional de arte de Bielorrusia, en Minsk.

En su madurez Repin retrató a muchos de sus más ilustres compatriotas, incluyendo al novelista León Tolstói, el científico Dimitri Mendeléyev, el jurista y político Konstantín Pobedonóstsev, el filántropo y mecenas Pável Tretiakov, los compositores Modest Músorgski, Aleksandr Glazunov, Mijaíl Glinka y Antón Rubinstein y el poeta y pintor ucraniano Tarás Shevchenko.

En 1900 se le encargó por parte del gobierno de Rusia su mayor obra: un óleo de 400 por 877 centímetros que representase una sesión solemne del Consejo Estatal del Imperio Ruso.El propio Repin diseñó su casa, situada a unos cuarenta kilómetros al Noroeste de San Petersburgo. La llamó "Penati", en referencia a los Penates (ídolos romanos protectores de la familia y del hogar). Tras la Revolución de Octubre (1917) la zona en la que se encontraba, Los Penates, fue incorporada a Finlandia. Diversas instituciones soviéticas le invitaron a regresar a su tierra natal, pero él rechazó los ofrecimientos argumentando que era demasiado anciano para hacer tal viaje. Durante esta época Repin dedicó mucho tiempo a pintar temas religiosos, aunque el tratamiento que hizo de los mismos no fue habitualmente tradicional sino innovador.

Con la excepción del retrato del primer ministro del gobierno provisional, Aleksandr Kérenski, no pintó nada relevante acerca de las revoluciones de 1917 o del experimento soviético que las siguió. Su último cuadro, un festivo y exuberante óleo llamado "Gopak", trata sobre un tema cosaco ucraniano.

Falleció en 1930, en Los Penates (Kuokkala, Finlandia - actualmente Repino, provincia de Leningrado-). Sus restos están enterrados en el jardín de la casa.




miércoles, 11 de febrero de 2009

Vrubel

(Osmk, 1856-San Petersburgo, 1911) Pintor ruso. Su obra, inicialmente relacionada con la idea de un nuevo arte religioso nacional, señala el tránsito del realismo al simbolismo.

Egresado de la Academia de Bellas Artes de San Petersburgo, el pintor Mijaíl Vrubel integra en 1889 la colonia de Abramtsevo. Vrubel es una personalidad aparte, un artista profundamente original e independiente, que llevará el arte ruso al umbral del siglo XX.

En Ambretsevo, Vrubel continúa pintando, en particular una formidable serie de "demonios", pero trabaja igualmente en campos tan diversos como la cerámica, la arquitectura, la escultura, los paneles decorativos, los decorados de teatro.
Llega a ser el representante más destacado del estilo "Modern", una versión rusa del Art nouveau.

Este vasto campo de actividad así como el interés que manifiesta por las fuentes tradicionales acerca la obra de Vrubel, pese a su singularidad, a las preocupaciones artísticas de su época.

Una sección entera de la exposición está dedicada a Vrubel. Permite situar el trabajo del artista en ese contexto de emergencia de un arte nacional, cuando se le asocia por lo general a los simbolistas europeos.

En los diez últimos años de su vida, Vrubel sufre de trastornos mentales que le obligan a internarse cada vez con más frecuencia. Se dedica al dibujo a partir de 1902 y continúa trabajando hasta 1906. Él solo habrá realizado la transición entre la antigua y la nueva generación de artistas rusos.

martes, 10 de febrero de 2009

EL FILO DE LA NAVAJA


Junto a "Servidumbre humana" ésta es la novela más conocida de William S. Maugham. Fue llevada al cine en 1946 con Tyrone Power de protagonista. El título original (1944) es The Razor’s Edge:" El filo de la navaja".

Nos situa en la época de entreguerras. Con personajes americanos, pero la acción no se sitúa en el nuevo continente (como "El gran gatsby" de S.Fitzgerald) sino en Paris, Londres, la Costa Azul...
Es un retrato de la alta sociedad, una radiografía certera y precisa de una clase en decadencia, fosilizada en el tiempo.

Frente a la adoración por los bienes materiales, al culto al becerro de oro, emerge la figura de Larry. Sin él la novela sería mero costumbrismo, simple folletín. Con Larry como contrapunto sube mucho la novela. Es un personaje como los de H. Hesse que buscan su identidad vagando por el mundo, como caballeros andantes. Larry también llega hasta la India en la busqueda de la sabiduría de brahames o yoguis. Su aprendizaje, su crecimiento personal, incluye los conocimientos y también las vivencias. El sumatorio del viaje interior y el exterior.

Una novela en la que tan pronto nos hablan de misticismo como de los trajes de la nobleza. Diversidad y mezclas en las que el novelista es el narrador de la historia y opina e interviene sin contaminar demasiado la obra.

Habra que recurrir a la frase del citado H.Hesse, también atribuida a Picasso: "yo no busco, encuentro".